domingo, 25 de octubre de 2015

CORTADO

SÓLO CORTADO
 
La chica de los botines grises se ha levantado al amanecer. Sale a la calle y todavía la oscuridad se corta a tramos por la luz de las farolas del paseo.
 
Camina sin rumbo fijo en busca de algún lugar donde tomar un café mientras siente como el aire frío, agazapado, va penetrando en sus pulmones y embota su mente.
 
Es plenamente consciente entonces de su ser y, a la vez, el universo entero la define.
 
Toma su cortado en copa de breve ambrosía.
Y está sola.