Y si no, que se lo pregunten al dueño de esta silla de ruedas que sin pensárselo dos veces abandonó su "vehículo" en medio del aparcamiento del estadio de un conocido club de fútbol en los preliminares de un encuentro.El mencionado medio de transporte permaneció durante casi una hora hasta que fue retirada, desplazándose a merced del viento -que no de la marea- y resistiendo las miradas curiosas de algunos aficionados que la consideraban poco digna de ocupar un espacio reservado a personajes con tracción trasera.
Si su dueño volvió a casa en ella o sobre unas parihuelas permanece en el misterio.
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